Un lugar especial "Mi mente"

Cuando mi corazón dice basta y ya no puede mas,
yo me traslado a un lugar muy especial.
No hay nada más bonito que viajar con los ojos cerrados.
Sin moverte de la cama. Cerrar los ojos.
Sentir el viento mientras llegas a los sitios a los que quieres ir.
Da igual que no lo conozcas. No hace falta haber estado en
un lugar para conocerlo.
Mi mente, es un lugar mágico, donde solo yo puedo viajar
a través de mis pensamientos.
Voy caminando por el tiempo en busca del arco iris,
quiero encontrar en los colores, la frescura de la mañana
la suave brisa de la noche y un atardecer en mi alma..
Es un viaje a mi interior, vuelo dentro de mí, sin rumbo
sin prisa, dejándome acariciar por la brisa y llenando mi
alma de paz.
Al cerrar mis ojos, el camino veo con claridad, en la inmensidad
de mis pensamientos me pongo mis alas y comienzo a volar.
Volar en libertad sin trampas ni ataduras, si mentiras ni
falsedad, solo volar dentro de mi verdad.
En mis viajes recorro sus calles, callejuelas y parques,
donde hay niños jugueteando en los portales.
Lo sé. Es una ciudad imaginaria. ¿Pero no lo son todas?
Montañas, valle y ríos en los que me sumerjo para poder
hablar con los seres que allí están, ellos me entienden y
me ayudan a encontrar mi camino.
Los árboles me amparan entre sus ramas proporcionándome
la calma y el sosiego que mi cuerpo necesita, subida entre sus
ramas puedo disfrutar de las cosas más simples pero las mas
bellas y hay encuentro las fuerzas para seguir.
Mirar una pequeña hojas en mitad de una cascada, el agua cae
con fuerza sobre ella, pero hay esta ella resistiendo parece que
va a caer, pero eso no sucederá ella es fuerte y lucha incansable
arriba y abajo, yo la miro embelesada y ella me hipnotiza
dándome una lección de vida.
Después, levanto el vuelo y viajo asta la cuidad de mi vida, lugar
donde habitan todos mis recuerdos, los hay buenos, alegres y
procuro recrear mi mente en ellos y si de repente presiento
que mi carcelero acecha, tratando de atraparme y dejarme
impotente, yo levanto el vuelo y escapo de sus garras una vez
más.
En ella busco a mi amor, pero no lo encuentro, corro desesperada,
siempre acabo en la playa desnudando mi mente y cuerpo, el cielo
anaranjado y le rumor del mar recorre las orillas de mi vida.
Pero de pronto el aparece, justo al atardecer junto al crepúsculo y
entonces todo ya es perfecto, hay paz y tranquilidad y el sol
palpita junto a mi corazón.
Cuando comencé estos viajes, era difícil dirigirme a donde yo quería,
pero con el tiempo, logre tener un lugar mágico y solo para mi
donde nada ni nadie puede dañarme y donde solo mando yo,
y puedo volar en libertad.